Para David Delfín el año 2002 no fue uno cualquiera. En septiembre de aquel año, se estrenaba como diseñador en la pasarela Cibeles. La polémica estaba servida. Inspirado por el movimiento artístico Surrealista, se había atrevido a sacar a las modelos con capuchas-saco y con sogas al cuello. La provocación para muchos -para los medios- era un alegato vejatoria hacia el género femenino. Tras muchos artículos y disculpas del diseñador, sus colecciones se han seguido presentando en la pasarela madrileña con bastante éxito, tanto que hasta a probado suerte en Nueva York.
El desfile de esta mañana ha sido un cumpleaños que empezaba con un corto -publicitario del nuevo coche de Mercedes, patrocinador de la pasarela- protagonizado por sus amigos, Bimba, Mario, Alaska, incluso, Rossy de Palma. El mini film desemboca perfectamente con el desfile, pues el final del vídeo coincide con la llegada de Bimba al backstage y la realidad, su salida a la pasarela. Davidelfin ha presentado una colección que guarda su ADN intacto, y es madura y elegante. Sus incondicionales: el blanco, el negro y el gris, rotos en ciertos looks por manchas de color que simulan salpicados de pintura. Aciertos sin excesos. Davidelfin en estado puro.
