El Ramadán ya está aquí y las marcas cada vez más quieren meterse en su espíritu.
Tras firmas de lujo como Dolce & Gabbana, Mango se ha unido a la tendencia de crear colecciones para el Ramadán: faldas, caftanes, túnicas y vestidos maxi en tejidos frescos para combatir el calor y combinados con los accesorios adecuados para que las chicas del mercado árabe sigan interpretando la moda en este momento del año tan importante para ellas.
Tras el boom de satisfacer los deseos del mercado asiático, el árabe supone un sector muy interesante para las marcas que, cada vez más, tienen que reinventarse para cumplir con todo tipo de necesidades. Y es que la población musulmana invierte, según el Reporte Global de Economía Islámica de 2015 y 2016, 200.000 millones de euros en ropa al año y, según Thomson Reuters, en el 2019 estas compradoras destinarán en torno a 450.000 millones de euros: superando a los mercados de Reino Unido, Alemania e India juntos. No es en absoluto un mercado al que descuidar.
«Sensibilizarse con las características de mercados como el árabe, el asiático, países fríos o de temporada invertida forma parte del ADN de Mango», han declarado desde la compañía. «Desde el Departamento de Colecciones Especiales se desarrollan diseños exclusivos cumpliendo con los cánones culturales y religiosos de países en distintas zonas, como la de Oriente Medio».
La colección llegará a las tiendas y a su web el próximo 30 de mayo y a pesar de que no sigas los preceptos de la ley musulmana, hay más de un look apetecible.
©Mango / Yo Dona