Hace casi cuatro meses desde que se anunció la entrada de Peter Copping en Oscar de la Renta y más o menos el mismo tiempo desde que perdiéramos al gran diseñador. FEcha tan señalada ha sido la que nos ha traído el primer trabajo de Copping como director creativo de la casa.
Y los cambios llegan desde el principio: si Karlie Kloss había sido la elegida para cerrar el desfile con De la Renta cada temporada durante los últimos cinco años, en esta ocasión se sentó en primera fila con su mejor amiga, Taylor Swift, para disfrutar de esta nueva etapa.
Como es normal cuando se toma el timón de una casa con una estética distinta, Copping no ha ofrecido ninguna revolución; sólo una re-interpretación leve de los habituales de la casa sazonados en fabricaciones familiares.Los primeros looks dejaban ver un soplo de Nina Ricci pero teniendo en cuenta que el look de la Renta y el Ricci tienen mucho en común, la fusión se ve natural.
Copping dejó una carta a sus invitados sobre los asientos: «Estoy muy orgulloso de haber sido elegido como el director creativo de Oscar de la Renta. Desafortunadamente las cosas no van de acuerdo a nuestros planes y nunca tuve la oportunidad de trabajar con Oscar, que es algo que lamento profundamente. En esta, mi primera colección, espero haber conseguido honrar el legado de Oscar y también iniciar un nuevo capítulo para la casa.» Y es que el diseñador británico tiene ante sí el enorme reto de conquistar al duro público estadounidense al tiempo que mantiene la herencia de uno de los diseñadores más respetados, queridos y que más impactantes momentos de alfombra roja ha dado.
De momento lo ha intentado con siluetas muy femeninas y estilizadas en blancos que contastan con negros, granates y azules oscuros y toques metalizados en tonos vibrantes en looks que tientan por igual a las amantes de la moda europea (la colección es muy francesa) y la alta sociedad de Manhattan.
¿Qué te parece el debut del creador?
©Vogue UK