La tarde del pasado sábado 13 de agosto nos sorprendía la noticia de la muerte de Jesús del Pozo a los 64 años debido a un efisema pulmonar.
Pionero en la creación de un diseño de vanguardia en el Madrid de la transición, Del Pozo se mantuvo siempre en la línea de aquellos diseños donde el estudio de la forma era tan importante como el tejido. En 1946, había nacido en el seno de una familia acomodada y por seguir las tradiciones, cursó estudios universitarios: primero, durante dos años Ingeniería Industrial, pero la dejó por arquitectura de interiores y diseño de mobiliario. Fue en 1974 cuando abrió su primera tienda dedicada a la ropa de hombre en la calle Almirante -donde había nacido-. Al poco tiempo, prensenta su primera colección de hombre en París.
En 1979, da un giro y Jesús del Pozo empieza a dedicarse por completo al diseño de ropa femenina. Su trabajo en la confección le reportó los mejores premios: fue el primer diseñador de moda en recibir la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes (1998), pero, en 1981, había obtenido el premio Aguja de Oro a la mejor colección y, en 1989, el Premio Nacional Cristóbal Balenciaga. Jesús del Pozo buscaba la originalidad, pero sin crear una moda femenina uniformada, sino donde cada mujer pudiera aportar su propia personalidad.
