Del interior bien pegado al cuerpo al exterior más sugerente. Este ha sido el corto pero revelador camino que ha hecho el encaje. Hubo un tiempo en que este tejido sólo se veía en la intimidad. Hace años que se convirtió en una elegante prenda o remate delicado para sofisticados atuendos femeninos. Allá por los 70, los primeros en lanzar diseños que exponían el cuerpo de la mujer fueron Yves Saint Laurent y un Karl Lagerfeld que diseñaba para Chloé. Desde entonces hasta hoy el look lencero ha ido y venido muchas veces, y este invierno es una de las apuestas fuertes.
Las celebrities lo lucen con ganas y buen gusto: Gwyneth Paltrow con su sencilla elegancia, Rihanna con un punto más extridente, Dita Von Teese, lleva este tejido que encaja perfectamente con su estilo; y también la joven actriz Emma Watson que en su «presentación de niña a mujer» soprendió con un mini vetido de encaje negro.
Sobre la evolución de este sugerente y delicado tejido que tuvo su origen en Italia y Flandes, leía el pasado sábado un artículo de Suzy Menkes. Ahí recoge las diferentes visiones que sobre él han tenido distintos diseñadores a lo largo del siglo pasado y cómo la industria ha sabido copiarlo, en una versión menos delicada y más reproducible para su consumo mayoritario. Si os interesa leer el artículo completo, podéis hacerlo aquí.
Realmente se han copiado estos diseños en encaje, y cada día más en tiendas sin marca conocida y de nueva creación. Un ejemplo de ello es la tienda prestigiofashion.es en la que hay muchos diseños en encaje, y vestidos en nylon copia de famosas. Ya se copia de todo en este mundo, no te puedes fiar…
gracias por tus entradas, blog valiosísimo