Alexander Wang ha anunciado que, además de su papel como director creativo de su marca epónima, también asumirá inmediatamente las funciones de presidente y CEO, papeles anteriormente en manos de su madre, Ying, y su cuñada-en-ley, Aimie, respectivamente.
Su marca, que fundó en 2005, también considera otros cambios. Acaba de fichar a María Wang (que anteriormente trabajó como presidenta de DKNY) como directora ejecutiva y a su tía Caroline Wang (que viene de una carrera de 30 años en IBM) como vicepresidente ejecutiva.
«Mi familia y yo nos hemos estado preparando para este cambio mucho tiempo y después de 11 años, todos los miembros de la familia sabemos que es el momento correcto», dijo a WWD. «La familia sigue siendo miembros de la junta y dando todo su apoyo. Además, poco a poco se añadirán los ejecutivos de alta dirección de la empresa para apoyar el crecimiento.»
Wang no será el primer diseñador de alto perfil que asuma la doble responsabilidad de CEO y director creativo, se une a, entre otros, Christopher Bailey de Burberry. Pero, si bien ha habido informes de que lleva el negocio y el lado creativo de una casa de moda puede llevar a un compromiso, Wang, que se había apartado de su papel director creativo de Balenciaga año pasado para centrarse exclusivamente en su propio sello, se siente convencido de que puede equilibrar ambas cosas bien.
«El lado del negocio siempre ha sido importante para mí», dijo. «Ahora es el momento adecuado para sincronizar completamente los aspectos creativos y de negocios de la empresa y continuar fortaleciendo el diálogo que tenemos con nuestros clientes. Se siempre ha sido mi objetivo crear valor de marca, y dar vida a una compañía con integridad».
Esperemos que esta decisión salga mejor de lo que parece que lo ha hecho la tomada en Burberry.
