Nicolas Ghesquière y Balenciaga anunciaron el fin de su relación de 15 años en noviembre del año pasado, y el diseñador fue finalmente sucedido por Alexander Wang. Hubo mucha especulación respecto a su siguiente paso será (se dice que podría hacerse cargo de Louis Vuitton, en caso de que Marc Jacobs decidiera dimitir), pero parece ser que la historia entre la firma y el creador todavía no ha terminado.
Los rumores se destaparon el martes: Balenciaga demandaba a su antiguo director creativo Nicolas Ghesquière por los comentarios negativos que hizo sobre la compañía en una entrevista con la revista System.
En la controvertida entrevista, el diseñador declaraba que decidió dejar la casa de moda porque «terminó por sentirse demasiado solo» y que estaba siendo «absorbido». También acusó a la marca de estar «carente de sentido» y afirmó que sufría una gran falta de apoyo por parte del departamento comercial de la casa. Asimismo, criticó en repetidas ocasiones tanto a la marca como a Kering (anterior PPR), diciendo que trabajar allí era «una frustración tras otra», y que «comenzó a convertirse en una burocracia y poco a poco se hizo más corporativa, hasta que ya no estaba vinculado a la moda». También dijo que «empezó a sentir como si estuviera siendo aspirado en seco, como si quisieran robar su identidad al tratar de homogeneizar las cosas.»
Ante esto, el grupo empresarial ha decidio que estas declaraciones rompen la cláusula de confidencialidad y ha decidido tomar cartas en el asunto.
Se cree que la audiencia se llevará a cabo en septiembre u octubre de este año. Veremos en qué acaba esta historia…
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