El teatro Nokia de Los Ángeles saciaba ayer nuestra sed de glamour con la alfombra roja de los Premios Emmy de la televisión. Una cita obligada en la que cada vez hay más caras de Hollywood.
La clase de moda terminó con bastante buena nota en estilo aunque no en originalidad: mucha silueta de princesa y tres colores predominantes, rojo, blanco y negro.
El rojo fue sin duda el color de la noche. Rojo intenso o en vibrante tono anaranjado, se confundía con la alfombra que pisaban las estrellas. Lo lució Claire Danes en un vestido de encaje de Givenchy y January Jones, una de las preferidas, con un modelo asimétrico de Prabal Gurung. También lo lucieron Heidi Klum (Zac Posen), Christina Hendricks y Minnie Driver (ambas de Marchesa).
El negro fue el color elegido por Jessica Paré (Lanvin), Lizzy Caplan (Donna Karan Atellier), Sara Paulson (Armani Privé), Nancy O’Dell o Felicity Huffman.
El tercer color de la noche, el blanco, fue la opción de la curvilínea Sofía Vergara (Cavalli), Katherine Heigl (John Hayles), Kate Mara (J Mendel), Lucy Liu y Anna Chlumsky (las dos de Zac Posen), Michelle Monaghan (Giambattista Valli Couture) o una impecable, elegante y sexy Robin Wright con un traje de Ralph Lauren.
Julia Roberts estaba simplemente fantástica con un modelo de Elie Saab con el que abría la veda de los azules. Se unieron a ella Debra Messing (Ángel Sánchez), Keke Palmer y Christine Baranski.
La nota «arriesgada» la protagonizaron Halle Berry en un Elie Saab malva, Kerry Washington con su impactante vestido naranja (Prada), Zoey Deschanel (Oscar de la Renta), la estilista Louise Roe, Gwen Stefani (Versace Atelier) o Kate Walsh que demostró con su Stephane Roland que el amarillo no tiene por qué ser un mal augurio en el escenario.
La nota divertida la dio el Giambattista Valli Couture de Lena Dunham.
¿Cuál es tu estilismo preferido?
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