Se ha abierto la nueva veda oficial de las alfombras rojas cinematográficas de este año, la primera de ellas, la 69 edición de los Globos de Oro. Entre las asistentes, ¿notas comunes? Mucha falda de corte sirena, palabra de honor, tonos como el negro, nude y blanco, aunque con ciertas concesiones a colores vibrantes como verde hierba, amarillo, fucsia. Dentro de todo lo que se vió nosotros nos quedamos con lo siguiente.
Rooney Mara, de negro -tono elegante siempre-, con escote de vértigo en un cuerpo que se lo puede permitir. Nos gusta por mantener su nueva imagen de chica dura al tiempo que delicada -sí es posible- vaya a donde vaya.
Angelina Jolie, toda una sorpresa. No es santo de nuestra devoción y desde que comparte vida con Pitt ha mutado en un estilo más lady, evidentemente empujado por estilistas, un poco falso. Con el vestido de blanco marfil con detalle rojo de anoche lucía natural y guapísima, además el carmín intenso era el culmen de la feminidad.
Jessica Alba, desde hace tiempo se cuela en las listas de las más elegantes. Esta vez, aunque no arriesga, su vestido de encaje en tono nude destacaba su belleza natural por encima de cualquier artificio.
Natalie Portman, todo un acierto apostar por un Lanvin de pliegues imposibles-Elbaz es el maestro de los vestidos- en color fucsia y burdeos. ¿Quién diría que ha sido madre con esa figura?
Julia Margulies, sin ir espectacular, nos ha gustado por el juego de colores morado, del vestido de corte sencillo y minimal que escondía una espalda escotada ,y verde, de esos enormes pendientes.
Tilda Swinton, por dejar de lado en esta ocasión los pantalones manteniendo su estilo, impecable como nos tiene acostumbrados, y con un peinado muy ‘Swinton’ que marca carácter.
