De retratar a amigos yonkies, heterosexuales u homosexuales, la mayor parte de las veces en actitud amorosa, todo envuelto de un aire de decadencia, nostálgico pero muy cálido, a fotografiar una campaña publicitaria para una firma de moda de lujo italiana. La mujer que ha creado trabajos tan opuestos, pero con la misma calidad artística y belleza, se llama Nan Goldin.
¿La campaña? Como señalaba en el post de ayer, la norteamericana se puso tras el objetivo para la campaña publicitaria de Bottega Veneta de la temporada Primavera/ Verano 2010. Desterrando un poco los ambientes más underground, las localizaciones se sustituyeron por lo que parecen estancias de una casa con decoración de finales del XIX, algo decadente, desvencijada. Pero en todas las imágenes está la calidez lumínica propia de Nan Goldin que incluso, en algunos puntos, llega al quemado. ¿El artífice de esta colaboración? Tomas Maier, director creativo de Bottega Veneta, que eligió a esta fotógrafa que se autodefine como documentalista para crear una campaña única.
Ésta de arriba me recuerda a la siguiente fotografía:
No sólo han sido estos dos grandes fotógrafos -Robert Longo y Nan Goldin- los que han creado imágenes para Bottega Veneta, las colaboraciones han sido muchas, como la de 2007 con Tina Barney o la que se remonta a 2005 con Philip-Lorca diCorcia. Esto es sólo comenzar a tirar del hilo porque la lista es larga: Sam Taylor-Wood, Annie Leibovitz, Stephen Shore… Pero estas son otras historias.