Dos capitales de la moda celebraban la misma noche su duelo de alfombras rojas. Los Grammy y los BAFTA nos dejaron ayer bastantes más aciertos que los Goya, y es que lo sentimos por las actrices patrias pero todavía tienen mucho que hacer en materia de estilo.
Los BAFTA fueron los premios del glamour y de la silueta de sirena o al menos de líneas rectas y pulidas (pocas faldas de princesa desfilaron por Londres en esta ocasión).
Julianne Moore demostró que la edad es un plus de elegancia y sensualidad con un Tom Ford rojo Reese Witherspoon hizo muy buen uso de su escote con un Stella McCartney. El toque original lo dio Keira Knightley con su Giambattista Valli con largo sobre el tobillo y cuajado de flores.
Los Grammy fueron más una declaración del sexy aunque Rihanna deslumbró con un inesperado vestido de Alta Costura de Giambattista Valli. Pero en general, menos (tela) fue más (sexy), aunque no siempre supuso más elegancia… Incluso Miley Cyrus encontró la manera de mostrar su habitual desnudez en un modelo con ligera cola de Alexandre Vauthier en negro (uno de los colores preferidos de la noche) y hasta Taylor Swift, tan criticada siempre por su excesiva perfección se atrevió con un vestido de Elie Saab que a pesar del corte vaporoso mostraba sus piernas.
¿El toque divertido? En esta ocasión le tocó a Madonna y su Givenchy. ¿El derroche de estilo? Jane Fonda que nunca defrauda, esta vez de Balmain. Juzguen ustedes mismos…
¿Qué look es tu preferido?
©Zoe Report