
Urban Outfitters ha lanzado la última línea de su marca que está en pleno crecimiento. Llamada Re Work, pretende fusionar los mundos de la creatividad y la comercialidad mediante el empleo de un enfoque muy diferente al que habitualmente se ha utilizado por las marcas de la calle: los tejidos se decidieron en primer lugar, y luego la ropa se diseña.
«Esta colección está diseñada en su totalidad con la opinión de que hermosas telas llevan hermosos diseños y con la gama compuesta en su totalidad de esos tejidos remanentes, el proceso de diseño es diferente a cualquier otro,» ha afirmado Lizzie Dawson, jefe de diseño que se dejó el año pasado Topshop. «Es experimental y está diseñado siguiendo lo que se considera contrario a las tendencias. La moda es rápida y está en constante cambio y evolución. Al ofrecer algo así esperamos que podamos ofrecer el nuevo e invisible a nuestros clientes.»
La colección se ha creado en Londres y estará disponible en edición limitada por precios entre los 40 y los 250 euros, además cada pieza estara marcado con el número que indique cuántos se han hecho. Lo que se opone a la tendencia de edición limitada, sin embargo, es el precio.
©Urban Outfitters