
¿Qué tienen en común Keira Knightley, Ewan McGregor y Judi Dench? Que todos son clientes de Laura Lee Jewellery. Suponemos que Ewan compra para las mujeres de su vida porque como su nombre indica (en inglés) es una firma de joyas que se llama como su creadora.

Según la propia Laura cuenta, estaba destinada a diseñar joyas desde el momento en que descubrió el mundo del diseño. Sólo le faltaba saber qué -iba a diseñar-. Su creatividad se forjó por múltiples viajes, debido al espíritu nómada de su familia, que la llevaron de Inglaterra a la Europa continental, Asia y Australia. En esos periplos se desató su pasión por los abalorios, los adornos y la bisutería.

Con el tiempo y de nuevo en Londres, su intención de crear una nueva esencia de la joyería hizo que profundizara en todo su bagaje exótico para sacar su primera colección. Su puesta de largo fue en 1985 en las pasarelas de Londres y París. Entró por la puerta grande: sus diseños se empezaron a vender en algunas de las tiendas más exclusivas del mundo, como Harrods (Londres), Le Bon Marche (París) y Barneys (Nueva York).



Delicadas y románticas, las pequeñas joyas de Laura Lee se tallan y dan forma en plata, oro y con piedras preciosas. Aunque refinadas, sus piezas son para llevar cada día y mejor si son combinando unas con otras -varios anillos o varios colgantes-, ya que en lugar de esconderse, ganan relevancia.

. Laura Lee Jewellery se vende aquí. En Madrid, se puede encontrar en MOTT.