
El color, el corte, el diseño… hay muchos aspectos a considerar cuando vamos de compras y elegimos una prenda pero, ¿alguna vez te has planteado de dónde viene lo que te pones?
Cada vez es mayor la conciencia sobre la procedencia de la ropa y respetando esa concencia ha nacido The Acey, el proyecto d euna joven de 24 años británica llamada Holly Allenby.
Su intención es la de comisariar un espacio en el que sólo se comercien marcas que, según ella, combinan ética y estética porque según ella no se tiene que sacrificar estilo si quieres llevar algo ético. Si desea obtener más información sobre una prenda la web te la ofrece, si no, simplemente sabrás que estás comprando de manera responsable sin perder las tendencias.
Para inciar este proyecto, Allenby se inspiró en su etapa como directora de marketing en la marca de zapatos Toms en la que comenzó a cuestionarse la procedencia de su vestuario: «La gente me preguntaba dónde podían comprar ropa para que coincidiera con la resposanbilidad social de Toms (que, por cada par de zapatos que vende, da un par de niños en comunidades con problemas), y yo no tenía ni idea. Yo sólia cmprar en todo tipo de tiendas, pero empecé a preguntarme: ¿Dónde está fabricada mi ropa?»
La investigación la llevó a descubrir marcas independientes y éticamente motivada pero sin ninguna plataforma accesible. Alentada por esto, decidió lanzar su sitio. Ahora todas las actividades y la distribución tienen su sede en East Yorkshire, dirigida por la hermana de Allenby, y es supervisada por ella desde Londres.
Esta primavera The Acey ofrece marcas como Brawl que produce todas sus piezas contemporáneas y asequibles en Shadwell, Auria, que produce trajes de baño de poliamida reciclada, y la marca danesa Aiayu, que crea todos sus productos en origen, por lo que si el algodón proviene de Nepal, la pieza se hace allí por artesanos locales.
Básicos de armario y paz interior. ¿Qué más podrías querer?
©Fashion Telegraph